Bebés que actúan al natural para sobrevivir
El llanto del recién nacido pidiendo ser amamantado, que se considera normal durante los primeros meses del bebé, es calificado por investigadores de la Universidad de Harvard una táctica evolutiva de supervivencia.
Según el estudio, los bebés lloran para adaptarse al medio ambiente y sentirse protegidos por su madre, a quien su llanto la convierte en la cuidadora por excelencia y la responsable de su atención, lo cual reduce su cualidad de fertilidad y limita el proceso de fecundación.
Lloran para ser únicos
“Los bebés tienden a despertar a las madres a mitad de la noche para ser amantados, con ello incrementan sus oportunidades de supervivencia, pues la lactancia es un anticonceptivo natural que garantiza que por lo menos en seis meses no volverá a quedar embarazada y cuidará de manera exclusiva a su hijo”, asegura David Haig, investigador de la Universidad de Harvard.
Según la investigación, la selección natural preservará conductas como la succión y el sueño de los niños para suprimir la función ovárica en las madres, ya que de ese modo se podrán beneficiar del retraso del siguiente nacimiento.
“Esta conducta es parte de la herencia natural. De hecho, el periodo en que los bebés tienden a estar más tiempo despiertos durante la noche corresponde al lapso en que las madres regresan a ser fértiles”, informa el documento.
Datos curiosos
Según el trabajo de la Universidad de Harvard, los bebés se despiertan y lloran por la noche para retrasar el nacimiento de un hermano, ya que la competencia fraternal incrementa el riesgo de mortalidad. Se trata, por lo tanto, de un mecanismo biológico de supervivencia, como sería también el rechazo a probar alimentos nuevos durante los primeros años de vida.
El llanto desconsolado de un neonato suele ser un verdadero enigma para los padres primerizos. Las investigaciones más recientes sugieren la mirada del bebé como principal indicador del motivo de su angustia, ya que se ha demostrado que los bebés lloran con los ojos abiertos cuando sienten miedo o enfado y con los ojos cerrados cuando sufren dolor.
El trabajo, que fue publicado en la revista Evolution, medicine and public health, concluye que esta estrategia de selección natural se habría ido desarrollando a lo largo de miles de años y tendría su origen en la elevada tasa de mortalidad de los bebés cuando los intervalos entre nacimientos son demasiado cortos, especialmente en entornos con escasez de recursos y epidemias de enfermedades infecciosas.
Más información
www.mamanatural.com.mx
www.muyinteresante.es
Comentarios
Este articulo no tiene comentarios. Sé el primero en dejarnos un comentario...