¿Zapatos planos, comodidad garantizada?

Muchas personas suelen hacer caso a la orden de la mamá cuando les solicita “traerle los zapatos bajitos” para descansar los pies una vez llega a casa. Este tipo de calzado o los completamente planos aparentemente son lo mejor en comodidad y relajación, sin embargo, usarlos puede tener distintos efectos sobre la salud de los pies. 

Los zapatos planos están diseñados para una cómoda y efectiva caminata. También pueden ayudar a:

• Reducir el peso.
• Conseguir una apariencia de disposición para cualquier actividad.
• Crear una sensación de confort para el pie.

Dependiendo de su diseño, los zapatos planos pueden tener suelas delgadas, gruesas de goma o, incluso, suelas de papel. Por lo general son extremadamente atléticos o muy a la moda, dependiendo del estilo preferido por el usuario.

Por ejemplo, las zapatillas de ballet o ‘balletas’ son muy populares, sobre todo entre las jóvenes modernas, además suelen ser fáciles de quitar y poner, pero esta clase de calzado, con el tiempo, puede lastimar gravemente sus pies.

“No proporcionan soporte para el tobillo o el arco del pie y aunque cubren toda la planta del mismo, no tienen soporte integrado en el interior del zapato que ayude a mantener la posición correcta al caminar”, explica el ortopedista Gerardo Ruge.

Daños en los pies que se sienten en todo el cuerpo

Aunque la mayoría de los efectos del uso de zapatos planos son buenos, la verdad es que suelen ejercer mucha más presión sobre los dedos y los tobillos que los zapatos de tacón, y con frecuencia causan ampollas. El uso de zapatillas de ballet o de otras formas de zapatos planos sin soportes puede crear serios problemas en el arco y con el tiempo causar dolor al caminar.

Las lesiones aún más graves incluyen:

• Caída del arco del pie, una afección muy dolorosa.
• Dificulta al caminar.
• Imposibilidad para hacer ejercicio.
• Inflamación de los tejidos de la parte inferior del pie (fascitis plantar).
• Dolor en la parte inferior de la espalda y en los tobillos debido al “golpeteo” que sucede por la manera de caminar.
• Necesidad de medicación e incluso cirugía para curar el pie, si la condición ya es extrema.

Consejos que ‘caminan’

Independientemente de qué tipo de zapatos usa, asegúrese de que se ajusten perfectamente y no ejerzan presión excesiva sobre los dedos del pie, que pueda causar callos y juanetes.

• Si sus arcos empiezan a doler mientras usa zapatos planos necesitará amortiguarlos y mantenerlos en la posición adecuada.
• Los zapatos planos son ideales para caminar, pero no siempre son seguros para entornos de trabajo, si va a estar en una obra de construcción, asegúrese de que tengan suelas gruesas y punteras de acero.
• Si va a una entrevista de trabajo y es mujer, evítelos, pueden dañar la impresión general que el entrevistador se lleve de usted.

14 razones para un calzado ideal

Sin duda, los pies revisten suprema importancia y merecen más atención de la que suelen recibir. Por eso, elegir el calzado saludable y adecuado, es fundamental para cuidarlos y prevenir afecciones mayores. Estos consejos dados por el médico general Alberto Cormillot, en alianza con la medicina natural, le ayudarán a optimizar el soporte corporal que ofrecen los pies.

1. Prefiera zapatos forrados en algodón con el fin de prevenir los hongos.
2. Seleccione calzado con material rígido en los talones que le den estabilizad al pie.
3. Use, preferiblemente tacones, máximo de 2 a 4 centímetros de altura.
4. Prefiera zapatos de suela flexible y antideslizante que se adhieran con mayor facilidad al contacto con el suelo.
5. Verifique que no aprieten en la zona del tobillo.
6. Use una horma de zapato acorde con la forma del pie.
7. Prefiera calzado con puntera ancha que no presione los dedos y que permita el movimiento interno de los dedos hacia los lados, arriba y abajo.
8. Evite el calzado de plástico, este material genera sudor y maltrata los pies.
9. Revise que no contengan costuras internas que puedan lastimar.
10. Nunca utilice la talla de zapatos precisa o exacta para sus pies. Escoja tallas medio o un centímetro más grandes, de tal forma que entre los dedos y el interior de la punta de los zapatos quede un espacio cómodo.
11. Pruebe y camine con el calzado un buen rato antes de comprarlo. Preferiblemente mídase los dos zapatos, ya que es normal que un pie sea más grande que el otro.
12. Compre al atardecer cuando los pies están más hinchados, para evitar que cuando los vuelva a usar le queden pequeños.
13. Use calzado adecuado para cada deporte o actividad.
14. Compre teniendo en cuenta el tipo de pie: griego (tiene el segundo dedo más largo); egipcio (tiene el dedo gordo más largo); y polinesio (tiene el 2, 3 y 4 dedos parejos).

Más información
www.pedimedicalcenter.com
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