Una fórmula con 7 razones de inmunidad

Un sistema inmunitario sano está lo suficientemente fuerte para combatir los virus ( y otros patogenos )  con éxito y mantener el buen estado de salud de una persona.

“Para optimizar la inmunidad y controlar la inflamación, la alimentación y estilo de vida deben estar diseñados para recuperar las 7 características de un sistema inmunitario sano”, explica la doctora Gilma Garrido, especialista en medicina biológica.

Un cuerpo poderoso

• Cuando el organismo cuenta con inmunidad para resistir cualquier ataque viral ( y otros patogenos )   es capaz de:
• Mantener una barrera entre el mundo externo y el organismo.
• Identificar las sustancias dañinas y los microorganismos infecciosos que llegan a penetrar el cuerpo.
• Distinguir lo que pertenece al propio cuerpo y aquello que le es extraño al organismo.
• Determinar el nivel de amenaza que presentan las sustancias dañinas y los microorganismos infecciosos.
• Responder adecuadamente para reducir la amenaza, eliminando las sustancias dañinas y los microorganismos infecciosos. La inflamación, la inmunidad celular y la producción de anticuerpos son las respuestas a estos procesos.
• Reparar cualquier daño que resulte de una respuesta no específica.
• Favorecer la destrucción de las células que fueron alteradas y que son cancerígenas.

La fórmula de la ‘inmunidad’

El consumo de ciertos nutrientes alimenticios concentrados permite mejorar sus defensas y bajar la inflamación. Una novedosa fórmula nutricional permite mejorar su sistema inmunitario y sugiere tomar tres veces por día, con cada comida:

Calostro Bovino Liofilizado (400 mg) (4900 gr): el calostro contiene anticuerpos y sustancias que apoyan la respuesta específica del sistema inmunitario. Debido a que contiene sustancias que estimulan la reparación de la pared intestinal, es clave para manejar problemas de permeabilidad intestinal y colon irritable. El calostro no es leche.

Polvo Liofilizado de Bazo Bovino (250 mg): fuente de material celular para el bazo, órgano importante en el desarrollo de la respuesta inmunitaria. Es una excelente fuente de pequeñas proteínas llamadas polipéptidos capaces de activar la respuesta inmunitaria.

Arabinogaláctano (50 mg): sustancia extraída de la corteja de un tipo de conífero que mejora la flora bacteriana intestinal y aumenta la capacidad del sistema inmunitario.

Beta-glucano (50mg): sustancia que proviene de un hongo y ayuda a incrementar la respuesta celular del sistema inmunitario y mejorar la densidad ósea en los pacientes que presentan osteoporosis.

Lactoferrina (50mg): proteína del sistema inmunitario con importantes propiedades antimicrobiales (bactericidas y fungicidas), anti-oxidantes y anticancerígenas. La lactoferrina es derivada de la leche.

Vitamina D3 (1300 UI): forma activada de la vitamina D. La vitamina D estimula las células del sistema inmunitario que buscan y destruyen virus y bacterias patógenas. También es importante en la formación y el mantenimiento de los huesos, el control del crecimiento celular (efecto anti-cancerígeno) y el incremento de la eficacia de las hormonas de la glándula tiroidea. La deficiencia en vitamina D3 es muy común, por lo que su producción requiere exposición a la luz del sol.

Zinc (30mg): el mineral más importante en la activación y el control de sistema inmunitario. Se puede consumir hasta 50 mg diarios para mejorar la actividad inmunológica.

Aceite de Krill (1000 500 mg): aceite que proviene del Krill, un crustáceo de aguas frías del antártico. Debido a la ausencia de contaminación con metales pesados en el krill, este es la mejor fuente de Omega-3 y de fosfolípidos, nutrientes muy importantes para la regulación de la inflamación, del metabolismo de las grasas, de la salud hormonal, neurológica y cardiovascular. El Aceite de Krill es también fuente de un antioxidante muy potente llamado astaxantina.

Probióticos (1000 a 5000 millones diarios de colonias): microorganismos vivos que se consumen con el fin de repoblar o reequilibrar la flora bacteriana natural del organismo. La salud de la flora bacteriana del intestino humano es muy importante para el sistema inmunitario. De hecho, 80% de las actividades inmunitarias se ubican en el tubo digestivo. Es especialmente importante tomar probióticos después de haber consumido antibióticos, ya que estas drogas destruyen la flora. Una buena fórmula de probióticos contiene las especies de bacterias llamadas: lactobacillus y bifidobacterium.

Recomendación de consumo

Esta fórmula se puede tomar sobre un período extendido sin ningún problema. Una vez optimizadas las funciones inmunitarias y al mejorar la condición de salud, puede tomar la mitad de la dosis de cada componente de la fórmula con fines preventivos. Para menores de 12 años la mitad de la dosis recomendada es suficiente.

Si sufre de gastritis, reflujo, llenura o gases, presenta algún desorden de coagulación o insuficiencia renal, consulte a su médico

Otros consejos prácticos

La adopción de estilos de vida saludable también permiten fortalecer el sistema inmunitario por eso no descarte:

• Practicar ejercicio  
• Evitar el consumo de alcohol y tabaco
• Prevenir el estrés emocional
• ​Evitar abusar del consumo de antibióticos
• Tomar 2 litros de agua al día a sorbos
• ​Eliminar el consumo de grasas trans (margarinas y frituras)
• Disminuir el consumo de azúcar y carbohidratos (pan, papa, pasta).
• Disminuir el consumo de alimentos procesados y empacados
• Aumentar el consumo de hortalizas y vegetales
• Evitar el consumo de alimentos que no tolera o le causan alergias
• Realizar una pausa de la rutina diaria (caminar, hablar con los amigos o tener un pasatiempo).
• Descansar lo suficiente, dormir bien.
• Incluya alimentos en la dieta como limón, ajo, jengibre que actúan como purificadores del cuerpo y ayudan a reducir las inflamaciones.

Síntomas de un sistema inmunitario enfermo

• Permite que las sustancias dañinas y los microorganismos infecciosos entren fácilmente en el organismo.
• Facilita la baja en defensas e infecciones recurrentes.
• Genera lesiones inmunitarias capaces de causar alergias, enfermedades autoinmunes y reacciones a los alimentos.
• Provoca destrucción de las células que rodean el sitio de la inflamación.
• Falla en distinguir lo que pertenece al propio cuerpo y lo extraño al organismo. Resulta en enfermedades autoinmunes.
• Genera una recuperación muy lenta de la enfermedad.
• Evita destruir las células alteradas. Favorece el desarrollo de un cáncer.

 Más información
www.fundanatura.com
www.nutrabiotics.info

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