¿Para qué sirve un entrenador personal?

La obsesión por una figura esbelta, combinada con buena salud, hacen que las personas busquen alternativas para lograr la a como dé lugar. Skipp Swoope, entrenador de celebridades en Hollywood, le contó a Equilibrium por qué es necesario asesorarse de un profesional.

En el mundo de hoy, donde las personas reciben constantes ráfagas de información y publicidad por diferentes medios, la competencia por tener el cuerpo perfecto, la silueta más estilizada, los músculos mejor marcados y excelente condición física, es casi una obsesión.

Sin embargo, de la mano con la estética, mantenerse sano también es una prioridad. Por eso, los entrenadores personales son una opción que cada día toma más fuerza en lo que a equilibrar cuerpo y salud se refiere.

Ellos, profesionales expertos en el difícil arte de moldear y formar personas satisfechas con su físico, son la última moda para quienes quieren verse, sentirse bien y tener buena condición física.

Skipp Swoope es uno de ellos. Su amplia trayectoria en Los Ángeles, California (EE. UU.) no solo con celebridades, sino con grandes ejecutivos, modelos y gente del común, lo hacen ser todo un experto en la materia.

«El beneficio de tener un entrenador personal es darle continuidad a un programa de ejercicios personalizado, es decir, diseñado exclusivamente para cada quien, de acuerdo con sus objetivos y necesidades. Un buen entrenador guía a su cliente, de manera segura y sana, para conseguir sus metas, bien sea pérdida de peso, desarrollar fuerza, aumentar flexibilidad o mantener un buen estado físico en general” asegura el experto.

Primero, análisis de pies a cabeza

Ponerse en las manos de alguien que de un día para otro sugiere qué hacer y qué comer no es tarea fácil. Primero hay que tener claro lo que se busca, después, determinar si esos objetivos se ajustan a la realidad, pues hay personas que, por su contextura ósea o genética, nunca podrán reducir su talla o peso a niveles demasiado bajos.

Luego, es necesario evaluar anteriores tratamientos como dietas o rutinas de gimnasio, así como tener en cuenta las lesiones y factores de riesgo que puedan impedir la práctica de algún ejercicio en particular.

Cada quien, conforme con su historia de vida, recibe las recomendaciones pertinentes. El entrenador se convierte en un compañero, motivador y amigo, que hace de la tarea una actividad placentera, cargada de resultados, y que le anima a llevar una vida sana.

Al respecto, Swoope anota:

“Por ejemplo, si un cliente se está preparando para una boda en tres meses, me concentro en ayudarle a tonificar la parte superior del cuerpo con entrenamiento de fuerza utilizando pesas livianas y más repeticiones. Pero, si otro cliente es un golfista dedicado, incorporo entrenamiento funcional para ayudarle a mejorar el desempeño en su juego”.

Ser entrenador personal, sin embargo, requiere de una formación tanto académica como práctica, que faculte a los expertos en el complicado manejo de sus asesorados.

Su tarea de acompañamiento es tan crucial en la vida de una persona que incluso llega a ocupar el mismo nivel de importancia que el médico de cabecera, el guía espiritual o el psicólogo.

Por eso, no está de más cerciorarse de estos datos antes de elegir a la persona que se convertirá en su confidente en lo que a ejercicio se refiere.

Swoope, que estará en Bogotá los primeros días de abril, invitado por el Estudio de Pilates ProWorks, ha sido formado en el American Council of Exercise (ACE) y en la National Academy of Sports Medicine (NASM). Tiene certificación internacional de Pilates con Ivon Dahl y es experto en estiramiento avanzado y kickboxing.

Aunque entre las celebridades que atiende están Nicole Kidman, Robi Draco Rosa, John Lee Miller y Sofía Vergara, entre otros, él guarda el secreto profesional del trabajo con ellos, con más sigilo que un sacerdote.

Sin dar nombres propios dice que hace poco una de sus clientas famosas se quejaba de dolor de espalda y caderas por estar de pie durante más de cuatro horas en un set de grabación. Cuenta que ella, no obstante, aparentaba estar en forma y tener buena condición física. Pero su dorso era débil y sus músculos poco flexibles.

“Con ella trabajamos en lograr balance muscular y flexibilidad haciendo ejercicios básicos de pilates en la máquina Reformer, como estiramientos largos y cortos de la columna, y círculos con cintas en los pies. La condición mejoró en un par de semanas y ella ya está libre de dolor y acudiendo a sus largas jornadas como actriz”.

Modelo de vida sana

Tal y como le sugiere a sus clientes, Swoope es un modelo de vida sana. Para mantenerse en forma, aplica en sí mismo todos los consejos que les da y su rutina incluye un balance saludable entre pilates, ejercicios de resistencia y bicicleta.

Cuando se le pregunta por lo que sugiere para las personas que no tienen acceso pronto a contratar un entrenador personal, su recomendación es,primero, consultar un médico que les haga una evaluación completa y descarte posibles limitaciones para practicar algún ejercicio.

Segundo, hacer una dieta sana y balanceada, asesorándose de los recursos que brinda internet, como la página www.ptonthenet.com, en la que, por un precio razonable, se tiene acceso a cientos de artículos en salud y rutinas de ejercicios.

“Vengo a Colombia a enseñar y estoy a la espera de compartir las rutinas alegres pero desafiantes que diseñé para los colombianos que quieran unirse a mi grupo, finaliza.

Por: Amparo Díaz

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