¡Loncheras exitosas, niños felices!

Una de las mayores alegrías para los padres es que sus hijos siempre estén saludables, enérgicos y saltarines, muchas veces, deseamos que no se les prenda ni siquiera una gripa. Verlos enfermitos significa un profundo dolor y varias noches de trasnocho; «no puedo dormir», «me duele el estómago» y «no tengo hambre», son algunas frases que su pequeño le ha dicho con una carita con la que jamás quisiera volver a verlo.

Muchas de las enfermedades a las que su angelito está expuesto se pueden evitar por medio de una buena alimentación y como comenzó en forma el nuevo año escolar, es un buen momento para apropiarse de la alimentación de él.

A través de la ingesta de productos ricos en vitaminas y minerales el organismo crea defensas para eliminar el sin número de virus a los que continuamente están expuestas las personas y más los niños, que juegan con tierra, se meten las manos sucias a la boca y no son conscientes de los hábitos de higiene.

Los padres y los colegios

La mayoría del tiempo los niños lo pasan en el colegio, lugares en los cuales adquieren una formación guiada por valores que con el día a día van definiendo su personalidad. Por lo tanto, generar buenos hábitos alimenticios en el hogar y la escuela hará que su hijo, desde pequeño, aprenda a controlar la ansiedad, a saber qué y cuándo consumir. Aprender a comer bien y nutritivamente es un requisito para la salud física emocional y mental. Según Gustavo Díaz, nutricionista infantil, un menor de edad debería tener durante el día seis comidas para cubrir los requerimientos que exigen el organismo de los niños. La lonchera cubriría dos momentos importantes por lo tanto y esta debe contener alimentos que le proporcionen vitalidad y energía.

Tenga en cuenta los siguientes trucos para que a través de la lonchera usted vaya generando buenas costumbres en la alimentación y a su vez proteja de infecciones a su hijo:

1. Evite que el niño la escoja: como padres cometemos el gravísimo error de preguntarle a nuestros hijos qué desea para su lonchera sin antes haberle creado buenos hábitos alimenticios. Seguro que si le indaga sobre que va a querer para mañana de la lonchera, ellos inmediatamente van a recordar que su amiguito Juan el día anterior llevó un paquete con envoltura de superhéroe o una ‘cajita feliz’. Su hijo va a querer alimentarse con productos que contienen componentes químicos que no le van a ayudar a aumentar sus defensas, por el contrario, a intoxicar el organismo. Así que debe explicarle que es bueno para él y qué no.
2. Balanceé la lonchera: a todos los niños les encanta el dulce, sin embargo, usted debe controlar el azúcar que come su hijo balanceando su lonchera. Para ello, debe darle un tercio de harinas, otro de grasas y algo de calorías extra. Recuerde no incluir todo, sino seleccionar porciones justas y también adecuadas para su edad y peso. Una lonchera balanceada aportará a su buen crecimiento y desarrollo.
3. Dele proteínas, son una buena opción: las carnes magras, los pescados, los huevos orgánicos y el atún son indispensables para la formación y mantenimiento de los tejidos, favoreciendo a el desarrollo muscular. Utilícelos pero de manera creativa, compre moldes de figuras para hacerle divertida la comida a su hijo.
4. Dele a su hijo vitamina C: uno de los componentes más importantes para el desarrollo y crecimiento de su pequeño, es la vitamina C, concentrada en frutas como la naranja, que ayudan a la formación de colágeno, la cicatrización, la absorción del hierro y la defensa contra las infecciones. Un buen jugo de naranja ayudará a cerrar con rapidez esas heridas que continuamente se hace su angelito.
5. Proporcione fibra en la dieta: protege la flora intestinal y los alimentos ricos en ella le proporcionarán un adecuado tránsito intestinal, además, refuerzan el funcionamiento de los riñones. Se encuentra en frutas, verduras, legumbres y cereales como la avena.
6. Utilice envases adecuados: todos los productos que le empaque a su hijo deben ser preferiblemente en vidrio, pero si son de plástico por tema de seguridad, evite que los alimentos se mezclen. Utilice servilletas con diseños atractivos e igualmente utensilios de dibujos animados.
7. Sea recursivo: incluya en la lonchera de sus hijos vegetales en ensaladas con pollo o atún. Córtelos de manera distinta y busque aderezos saludables; por ejemplo dips de yogurt natural para untar o queso cottage.
8. Recurra esporádicamente a un postre: su pequeño merece deleitarse con deliciosas preparaciones y usted puede brindarle un alimento que sea natural, bajo en azúcar pero suculento. ¿Qué tal un pie de manzana orgánica?

Loncheras nutritivas

Estas son algunas ideas para empacar en la lonchera:

Lonchera número 1

• Leche descremada.
• Emparedado integral de jamón bajo en grasa, queso blanco y tomate.
• Una pera.

Lonchera número 2

• Jugo de mora.
• 1 barra de granola baja en grasa.
• Yogurt descremado con sabor y frutas deshidratadas.

Lonchera número 3

• Jugo de naranja.
• Baguette de atún con mayonesa light.
• Palitos de zanahoria con dip.
• 1 manzana verde entera.

Lonchera número 4

• Avena natural.
• Galletas rellenas de mantequilla de maní.
  «Arbolitos» de brócoli con dip de queso cottage.
• 1 mandarina.

A su hijo le debe encantar su lonchera y lo amará más a usted si le da lo que le encanta. Recuerde, que está empacándole sentimientos y él verá reflejado su amor en lo que le brinde. Varíe todos los días la lonchera e incluya a su pequeño para que le ayude a preparar los alimentos, ¡hágalo parte del proceso! De igual manera, debe explicarle los criterios por los cuales seleccionan los determinados alimentos que él llevará al otro día.

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