Las vacaciones ideales para el encuentro familiar

La temporada de descanso representa un momento importante y muy esperado del año, ya que permite liberarse de los compromisos  y realizar muchas  actividades represadas como realizar un viaje, pasar más tiempo con los seres queridos, tomar diversas clases, asistir a chequeos médicos, en fin, realizar  todo lo que las jornadas de trabajo no permiten. Y lo más importante, significa volver a estar con la pareja, con los hijos, con la familia, tiempo completo.

En la búsqueda del ‘descaso ideal’

Sin embargo, para algunas familias el cambio de rutina puede  resultar todo un caos, pues el descanso supone reacomodar la cotidianidad, modificar sustancialmente los horarios y enfrentar la vida familiar.

 “Esta tensión se da por la presión de conseguir en pocos días el descanso ideal y porque el trabajo disfraza conflictos de las familias que salen a flote cuando se está en vacaciones”, asegura Gabriela Sarmiento Brecher, médica especialista en psicoterapia Gestalt integrativa.

Para todos es obvio que las vacaciones son un objeto de deseo, pero también, por sí mismas, son un componente generador de estrés y ansiedad, provocando discusiones sobre los destinos y las maneras de realizar las vacaciones (el alojamiento, el presupuesto a invertir, los días, las actividades, el equipaje, etc.,). De hecho, las rupturas matrimoniales se incrementan en vacaciones en España, según el  Instituto de Política Familiar e igual sucede en Estados Unidos. En Colombia aunque no hay cifras consolidadas los expertos indican que sucede lo mismo.

“Muchos cónyuges se desconocen por completo cuando están juntos ya que el trabajo es una forma de excusarse para no confrontar los problemas matrimoniales, o el desenamoramiento”, complementa la especialista.

Descanso feliz para todos

¿Qué hacer para lograr la armonía familiar y evitar que los ‘malos ratos’ se apoderen de la diversión en vacaciones? Sencillas recomendaciones ayudan a este fin. Tómelas en cuenta y practíquelas, usted y los suyos se merecen un descanso feliz.

• Aproveche este periodo para acercarse al otro, tener tolerancia y buscar oportunidades de comunicarse sinceramente.
• Tome consciencia de cómo se actúa para que las cosas no estén funcionando.
• Acepte la responsabilidad mutua de los problemas.
• Trabaje conscientemente para mejorar la vida familiar.
• Escuche los deseos y opciones de todos los miembros de la familia, llegando a consensos que sean del agrado común.
• Planifique con antelación los detalles importantes de sus vacaciones, como tiquetes de avión o pasajes, planes de los niños, cuidado de las mascotas y plantas, etc,. de manera que estos factores no se conviertan en complicaciones del viaje y posteriores confrontaciones.
• Pida apoyo de sus familiares para el cuidado de los niños si no tiene con quien dejarlos mientras están en el receso escolar. Otras familias optan por apuntar a los hijos de vacaciones recreativas, y otros envían a los niños a cursos de campamentos. ¡Aproveche estas opciones!
• Aproveche esta época del año para dar amor y afianzar los lazos afectivos. 
• Reencuéntrese con sus hijos, las vacaciones son el momento ideal para hacerlo.

“Lo importante es la calidad del tiempo que pasa con sus hijos. La vacaciones deben ser aprovechadas como un tiempo de reencuentro con ellos, es el momento para jugar, de compartir actividades, escucharlos más y con mayor detenimiento, es tiempo para dialogar y no dejar preguntas sin respuestas”, afirma Juan Carlos Hernández Grosso, médico y psicoterapeuta.

Cuerpo y mente en armonía

Es importante resaltar que las vacaciones son parte del descanso real que necesita mente y   cuerpo para poder rendir tomarla en conciencia, con armonía familiar.

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