Germinados: alimentos vivos que brotan salud

Lentejas, alfalfa, trigo, soya y frijol forman parte de la variedad de germinados que, en lo posible deben consumirse en zumos frescos, ensaladas y sopas de vegetales. Prefiéralos orgánicos o sin tratar.

Los germinados son de fácil asimilación, bajos en calorías, ricos en fibras vegetales, imprescindibles para un buen funcionamiento y limpieza intestinal. Así que inclúyalos en su dieta diaria.

Alimentos vivos

Un germinado es cualquier semilla o grano de una planta que brota gracias al contacto con el agua, la luz y el oxígeno, ese proceso lleva a que se produzcan unas reacciones y sustancias que tienen propiedades nutricionales que aportan al organismo para llevar una vida saludable.

Los germinados también conocidos como alimentos vivos por su alto contenido de clorofila, oligoelementos, encimas, proteínas, vitaminas y minerales, poseen nutrientes tres veces más poderosos que la semilla de origen.

“Por eso son un verdadero modelo de eficiencia nutricional para todas las personas, pero principalmente para los adultos mayores convalecientes y niños, a quienes les podrían brindar muchas de las sustancias necesarias para su crecimiento. Además, son de gran utilidad en la modernidad cuando se hace más difícil conseguir alimentos sanos, naturales y verdaderamente nutritivos”, asegura Julio Ernesto Camacho, médico bionergético.

Una opción natural

Los brotes pueden ser la alternativa para los problemas más graves de la intolerancia a la mayoría de los granos y cereales, pues cuando se consumen germinados, las personas evitan efectos indeseados como:

• Llenura
• Flatulencia
• Dolor abdominal
• Mala digestión

Beneficios que se sienten

El consumo frecuente de estos alimentos:

• Alivia el estreñimiento.
• Ayuda a equilibrar la flora intestinal.
• Equilibra los niveles de colesterol.
• Proporciona efectos desintoxicantes.
• Mejora el funcionamiento de los riñones.
• Favorece la circulación sanguínea.
• Estimula la respiración y las defensas.
• Contribuye a retardar el proceso de envejecimiento.

Germínelos en casa

Los germinados constituyen una bonita labor de cuidado en el hogar. Se trata de un divertido pasatiempo de plantar, cultivar y cosechar que todos puedes realizar en conjunto como una actividad familiar. Una forma sencilla de conseguir brotes en casa es siguiendo estos sencillos pasos:

1. Vierta un puñado de semillas en un frasco de vidrio de boca ancha.
2. Agregue agua.
3. Cúbrala con una tela de tul y sujétela con una banda elástica.
4. Coloque el recipiente en un lugar oscuro, durante 9 a 12 horas.
5. Bote el agua.
6. Enjuague las semillas, escúrralas bien y guarde el frasco.

Al día siguiente:

• Enjuague las semillas de nuevo.
• Escúrralas
• Vuelva a guardar.

Repita este proceso cada 12 horas durante 9 días. Al cabo de este tiempo, agregue estos germinados a una ensalada de hortalizas frescas; puede adicionarle aceite de oliva. También puede agregarlos a los sándwiches.

Recomendaciones de compra y consumo

Normalmente los granos se consiguen en los supermercados y son aptas para el consumo humano, según lo debe indicar su etiqueta. Al comprarlos asegúrese de que las semillas estén recién cosechadas y no hayan permanecido por meses o años en bodegas. Además:

Adquiéralas en almacenes conocidos y de calidad donde los productos tengan una alta rotación.

Sepa que las semillas nuevas requieren menos tiempo para su germinación, por lo tanto necesitan corto remojo.

Tenga en consideración que cada semilla es un ser vivo diferente a los otros. Si a los 2 días no ha germinado y usted sabe que es una semilla fresca, entonces continúe mojándola las 2 o 3 veces al día hasta que brote.

Pruébela cuando el brote tenga el mismo tamaño de la semilla para detectar su sabor.

Guarde los germinados en la nevera, secos y en un frasco de vidrio con una servilleta absorbente en el fondo y tapado. Esto permite una mejor conservación.

Consérvelos máximo por 12 a 15 días.

Nunca los cocine, ellos son alimentos vivos que aportan gran número de nutrientes y vitalidad; así que al someterlos al fuego perderían su valor nutricional y energía.

Existen estudios científicos como los del profesor David Beguin, del Departamento de Nutrición Humana de la Universidad de Washington (WSU) en los Estados Unidos, que explican como los germinados constituyen un alimento extraordinario para equilibrar la alimentación de los países más industrializados y también permiten a las poblaciones de los países subdesarrollados alimentarse adecuadamente y de forma económica. Es una excelente alternativa de lucha mundial contra el hambre.

Consumir germinados proporciona vitalidad y fuerza creciente, y es menos arriesgado confiar en los alimentos que la naturaleza ofrece.

Añadir progresivamente germinados y brotes, así como varios alimentos vivos en la alimentación cotidiana, permite suplir fácilmente las necesidades nutricionales del organismo.

“Los germinados contienen mucha vitamina C y por lo tanto una persona que no esté acostumbrada a consumirlos puede notar efectos estimulantes. Por la misma razón, el consumo de germinados proporciona más vitalidad y hace que desaparezcan el cansancio y los problemas digestivos”, concluye la nutricionista Beatriz Alina Botero Mejía.

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