En el pacífico colombiano es tiempo de ballenas, de paz, de vida

Uno de los mamíferos más grandes del planeta, con imponencia y belleza únicas, llega a nuestro océano del sur para aparearse. El avistamiento de ballenas jorobadas es un espectáculo imposible de perderse.

Es famosa y no precisamente por su cuerpo escultural: pesa entre 40 y 45 toneladas, tiene una prominente joroba, ocupa 18 metros de espacio y se viste con una piel profundamente negra.

La ballena jorobada es un animal poderoso, que transmite respeto y admiración. Un inmenso mamífero que está en Colombia y usted no se lo puede perder.

“El avistamiento de las ballenas jorobadas permite observar, desde una distancia prudencial, la vida animal en su hábitat natural. Esto, sin que se afecten los comportamientos usuales de la especie, ni el ecosistema donde se encuentran”, explica Nancy Murillo Bohórquez, administradora del Parque Nacional Natural de Uramba Bahía Málaga.

En Colombia, el avistamiento ecoturístico de ballenas se da, generalmente, entre julio y finales de noviembre, aunque algunos ejemplares permanecen hasta los primeros días de diciembre.

Estos mamíferos nadan especialmente cerca de las costas de Bahía Málaga, del Parque Nacional Natural Gorgona, del Parque Nacional Natural Utría, de los Golfos de Tribugá y Cupica. Allí permanecen durante esa temporada para cumplir su función de apareamiento, parto, lactancia, reposo y socialización.

Pero, para que esto suceda, ellas deben hacer un largo viaje.

“Los estudios de fotoidentificación han determinado que las ballenas llegan al pacífico colombiano desde la Península Antártica y desde el Estrecho de Magallanes (un paso marítimo del extremo sur de Sudamérica), luego de una extensa migración de, aproximadamente, 8.500 kilómetros que dura entre dos y tres meses”, agrega Murillo.

Ellas eligen el pacífico colombiano porque está localizado en la franja intertropical, carente de estaciones climáticas, lo que les permite mantener una temperatura de 25°C en promedio, condición térmica vital para llevar a cabo las actividades fundamentales en su ciclo biológico.

Toneladas de belleza

Las ballenas respiran a través de una nariz o espiráculo que tienen en el dorso, y su canto puede llegar a viajar hasta 3.000 kilómetros a través del océano. Este sonido lo producen como una acción para cortejar y aparearse.

Sin embargo, también se conoce que emiten otros sonidos para llamar a los demás individuos y alimentarse cooperativamente. Su proceso de gestación dura un año; la lactancia, de 8 a 12 meses; y su vida completa se prolonga por 60 años aproximadamente. Pueden tener un ballenato cada 2 ó 3 años, y unos 12 en toda su vida.

Un avistamiento responsable

Antes de iniciar su viaje, es importante que comprenda la responsabilidad de preservación que tiene la humanidad con estos mamíferos de agua. Estos son algunos de los pasos que deben seguir los viajeros, el grupo guía y los responsables de las embarcaciones:

1. Cada embarcación permanecerá 15 minutos con el individuo o con un mismo grupo de ballenas. El tiempo de avistamiento no debe ser mayor de 30 minutos.

2. Se dejará un tiempo mínimo de 30 minutos de descanso a las ballenas desde el retiro de una embarcación y antes de que otra se acerque.

3. Se debe evitar un acercamiento por el frente o por detrás de las ballenas.

4. Por ningún motivo les corte el camino o les impida avanzar, no las rodee ni se ubique en medio de un grupo o entre la madre y su cría.

5. Cuando se detenga para efectuar el avistamiento, el motor se debe poner en neutro.

6. Evite hacer seguimiento de una ballena con su cría. Si hay un encuentro casual con una madre y su cría, debe abandonar el área a una velocidad lenta y constante, que no provoque oleaje, y alejarse a una distancia mayor de 500 metros.

7. En el evento de que una ballena o grupo de ballenas se aproxime a una embarcación, se debe detener la marcha de la nave poniendo el motor en neutro y esperar el comportamiento de los cetáceos en los siguientes minutos, ante la posibilidad de que las ballenas saquen intempestivamente sus aletas pectorales o cola. Luego de observar el comportamiento, se podrá reanudar el avistamiento.

8. No se debe intentar un acercamiento cuando las ballenas se encuentran saltando o realizando otro tipo de conductas activas que requieren espacio.

Un viajero responsable

Para obtener más información sobre el avistamiento responsable, los planes de viaje y las ballenas jorobadas, consulte a:

• La Fundación Yubarta.
• Los parques nacionales naturales de Colombia.
• WWF Colombia.
• El Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras “José Benito Vives de Andréis” (Invemar).
• La Guía de avistamiento de ballenas jorobadas. Colombia, Ministerio de Comercio Industria y Turismo.

Por: Paola Andrea Martínez