El frío como opción terapéutica de la medicina natural

La crioterapia puede ser terapéutica o estética. Estudios recientes demuestran que ofrecería resultados positivos en el tratamiento de ciertos tipos de cáncer.

Se conoce comúnmente como la aplicación de frío sobre el organismo con el fin de producir un efecto antiinflamatorio, analgésico y anestésico.

Hoy en día la crioterapia, también se aplica a manera de criocirugía, procedimiento que usa el frío intenso para congelar y destruir un tejido enfermo.

Aplicaciones estéticas

La crioterapia en estética es muy apetecida gracias a sus efectos reafirmantes y reductores; se efectúa mediante vendajes o bolsas que producen una baja de temperatura corporal lo cual obliga a transformar las grasas en calor con la consecuente pérdida de peso.

La crioterapia estética se puede usar para:

• Reducir grasa general o localizada
• Eliminar celulitis
• Reducir la apariencia piel de naranja
• Favorecer el drenaje linfático
• Reafirmar de la piel

Aplicaciones terapéuticas

Los efectos terapéuticos de la crioterapia son antiinflamatorios, analgésicos, antiespasmódicos y de reabsorción de edemas, por lo tanto está indicada en casos de:

– Posoperatorio de apendicitis y peritonitis agudas
– Vómitos, ya que es relajante del estómago.
– Enfermedades vasculares periféricas (várices, entre otras).
– Traumatismos como contusiones, fracturas, desgarros musculares y hematomas, ya que disminuye el edema y el dolor.
– Inflamaciones bacterianas, para disminuir la toxicidad.
– inflamaciones reumatoides agudas y subagudas.

La crioterapia para el cáncer

Científicos del Instituto de Cáncer Karmanos, en Estados Unidos, demostraron que la crioterapia, puede ser una herramienta segura, eficaz e indolora para reducir el tamaño de los tumores benignos en la mama.

Una vez los tumores se trataron con la crioterapia, se redujo en un 70% el registro de residuos cancerígenos.

El avance en el tratamiento del cáncer de mama llevó a que se aplicara la crioterapia en otros casos, como lesiones neurológicas y cáncer próstata, para mejorar las condiciones de los pacientes, con resultados positivos.

En este campo la crioterapia se puede utilizar para tratar:

• Tumores de piel
• Lunares precancerosos
• Nódulos
• Papilomas cutáneos
• Retinoblastomas, un cáncer infantil de la retina.
• Cáncer de hígado y cuello uterino, especialmente si no es posible efectuar la extracción o amputación.

La crioterapia se usa también para tratar lesiones tumorales en otras partes del cuerpo, tales como riñones, huesos (incluyendo la columna vertebral) y pulmones.

Si bien se necesita investigación adicional para determinar su efecto a largo plazo, la crioterapia ha demostrado ser eficaz en pacientes seleccionados.

Beneficios

• Menos tiempo de recuperación
• Menos dolor durante y después del procedimiento
• Menos traumático
• Menos costo
• Menos efectos secundarios

Sin embargo, como en cualquier procedimiento y de acuerdo con el tipo de cáncer, se debe consultar al médico sobre los riesgos o daños colaterales que puede tener la crioterapia, según sea el caso.

¿Cómo funciona?

La crioterapia aplica nitrógeno o gas de argón a temperaturas extremadamente bajas para destruir el tejido enfermo. En la piel se aplica nitrógeno líquido directamente.

Para tumores ubicados en los órganos internos, se inserta uno o más aplicadores o criosondas, hasta el sitio del tejido afectado. Como consecuencia de este impacto, el tejido vivo muere, y una vez que las células se han destruido, los glóbulos blancos del sistema inmune, trabajan para eliminar el tejido muerto.

Contraindicaciones

No se recomienda cuando existe:
*Presión arterial alterada
*Cardiopatías
*Reumatismo óseo
*Sensibilidad cutánea
*Urticaria
*Alergia al frío
*Enfermedad de Raynaud.