El árbol de Navidad es el árbol de su vida

Muchos hogares en Colombia por esta época se llenan de color, luz y adornos que se compilan en el árbol de Navidad, pero, ¿qué significa cada parte que constituye ese tradicional arreglo decembrino? Son varios los símbolos que encierra este particular árbol. Conózcalos.

Para Santiago Delgado, especialista en tradiciones navideñas, el árbol de Navidad es un elemento que invita a reflexionar en familia y a transmitir valores. Cada una de sus partes (tronco, ramas, estrella, adornos, lazos, luces, pedestal) tienen un significado simbólico. Son siete los elementos que lo componen, los cuales son motivo de inspiración para el año que comienza.

7 razones que visten su árbol

Con la asesoría de la psicóloga española Noemí Fernández, le contamos cuáles son esos consejos prácticos y estrategias psicológicas que debe tener en cuenta para crecer y mejorar aprovechando la época y el árbol navideño:

1. El tronco: es la representación de nosotros mismos, el reflejo del interior y de la esencia de nuestro ser. “Para crecer como personas y mejorar nuestro ‘yo interior’, deberíamos hacer una revisión de quiénes somos y evaluar si estamos contentos o no con la persona en la que nos convertimos”, sugiere la Doctora Fernández.
2. Las ramas: representan a nuestro grupo familiar más cercano, los lazos de sangre. Es importante reflexionar si existen relaciones de calidad, aprovechar el tiempo y disfrutar con la familia.
3. La estrella: es el norte de nuestra vida u objetivo principal hacia donde nos dirigimos. “Podemos hacer el ejercicio del ‘camino de la vida’: dibujar nuestro recorrido personal desde el nacimiento hasta el momento presente y continuarlo fijando metas por conseguir desde hoy en adelante”, señala Fernández.
4. Las luces: son nuestras guías e inspiraciones espirituales o filosóficas. Noemí Fernández aconseja revisar nuestros valores y ver si estos aún son de aplicación. “Los valores que nos movieron de pequeños no tienen por qué ser los mismos que lo hagan de adultos o no de la misma forma, por tanto, tenemos que adoptar nuevos valores”.
5. Los adornos: simbolizan nuestros ‘tesoros’ o posesiones materiales y la prosperidad económica. Para la psicóloga, hay que trabajar por conseguir la estabilidad económica. Sin embrago, son las cosas espirituales las que se deben cultivar con más ahínco.
6. Los lazos: representan los vínculos con los seres queridos (pareja, amigos, etc.). Las relaciones personales debemos fomentarlas como una prioridad en nuestra vida. Siempre hay que buscar espacios de calidad para relacionarnos afectivamente.
7. El soporte: son las creencias y las raíces o conexiones con el mundo exterior. Es la conexión entre lo que creemos y lo que hacemos. El ser humano, en su constante búsqueda de mejoramiento debe transformar creencias y conductas con el fin de abandonar aquellas que no hacen bien.

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