Derrotar el envejecimiento es posible

La ciencia viene desarrollando nuevas posibilidades para controlar los efectos de la edad en los seres humanos y lograr la prolongación de la longevidad.

Según la International Longevity Alliance (ILA), cuyo objetivo es divulgar información veraz y oportuna acerca de las nuevas posibilidades antienvejecimiento y gestionar ante las autoridades gubernamentales mayor apoyo a la investigación en este campo.

“Además, nos proponemos buscar recursos para proyectos concretos, lo que finalmente resultará en un avance mucho más rápido hacia la conquista de esta meta. Cada día que se gane en la derrota del envejecimiento, significa cien mil vidas humanas que se salvan”, asegura Adrián Correa, coordinador de ILA para Colombia.

Un enemigo de años

Según los especialistas del Organismo, el envejecimiento es nuestro más antiguo enemigo, y se ha ufanado de ser indestructible por miles de años; incluso nos ha generado una especie de “síndrome de Estocolmo”, debido a que la mayoría de la gente empieza a verlo como algo “agradable”, precisamente porque parece inevitable.

Sin embargo, parece que esto ya no es así. Los científicos aseguran que el envejecimiento es un ‘síndrome curable’. La idea no es nueva. La bioquímica comprobó hace más de 100 años que somos una compleja maquinaria química, que aunque compleja, es comprensible; y a medida que entendamos seremos capaces de mantenerla en funcionamiento mediante la aplicación de las terapias requeridas sobre los ciclos bioquímicos adecuados.

¿Qué es lo novedoso?

Hace 14 años el biogerontólogo inglés Aubrey De Grey, sorprendió al mundo científico cuando anunció que, en su opinión, contando con los recursos suficientes, las primeras personas que iban a llegar a la edad de mil años con cuerpos tan jóvenes como los de un treintañero, podrían estar vivas en ese momento.

“Lo novedoso, entonces, es que usted y yo tenemos la posibilidad de lograr no envejecer, mediante la ciencia, asumiendo los hallazgos del doctor De Grey referentes al decaimiento mitocondrial, uno de los factores claramente implicados en el envejecimiento humano”, explica el coordinador de ILA.

Pero lo que De Grey exponía estaba en directa oposición a lo que la ciencia oficial afirmaba. Según esta, en voz de la gerontología, la ciencia que agrupa los esfuerzos por descifrar los mecanismos del envejecimiento, la derrota del envejecimiento era un objetivo que, aunque deseable, se encontraba a miles de años de ser alcanzado.

Los razones antienvejecimiento

La afirmación de De Grey es una argumentación rigurosamente científica, como lo demuestra él en su libro “Ending Aging” (El fin del envejecimiento).

Algunos de los factores que el autor determina se han dejado de lado por la ciencia, y esto ha permitido llegar a la fatalista conclusión predominante en la actualidad –del envejecimiento inevitable- que él no comparte. Entre dichos factores se destacan:

• El trance proenvejecimiento. Más allá de la opinión racional, habitando en el terreno de lo psicológico, existe una cierta aceptación temerosa del envejecimiento como algo inevitable, o peor aún, algo deseable. Pero precisamente es la apariencia de “inevitable” la que hace que generemos un mecanismo de defensa, que nos permita sobrellevarla de la mejor manera, incluso viéndola como algo hermoso.

Ese elemento psicológico, respuesta perfectamente normal ante una amenaza inmanejable, está presente en mayor o menor grado.

• La ultraespecialización que lleva al aislamiento entre las diferentes ramas de la ciencia. Esta impide que investigadores de ciertas áreas imaginen soluciones interdisciplinarias a los problemas que enfrentan. En su libro, el doctor Aubrey De Grey muestra un ejemplo genial y sorprendente de esto, cuando plantea su solución al problema del acúmulo de deshechos al interior de las células.

• La LOAR (Law Of Accelerating Returns) o “Ley de rendimientos acelerados”. Es una idea del futurólogo científico Raymond Kurzweil acerca de la velocidad con que la ciencia avanza y según la cual, en una versión muy simple, toda ciencia cuya velocidad de desarrollo dependa de la informática, crecerá de manera exponencial en el tiempo, y no lineal.

“Lo importante es que las investigaciones en biología, farmacología, genética y medicina en general, en este momento están montadas en la autopista de alta velocidad de la informática. Por lo que es de esperarse que las respuestas a los problemas médicos lleguen cada vez más rápidamente. Y eso se está viendo: mientras que para el desarrollo de un páncreas electrónico se tomaron casi 10 años, su distribución y puesta al público tomó menos de dos años”, comenta el señor Correa.

Las ideas revolucionarias del doctor De Grey han hecho eco en miles de científicos alrededor del mundo, quienes están haciendo esfuerzos en investigación por este camino.

“Estoy totalmente convencido de que la derrota del envejecimiento está mucho más al alcance nuestro de lo que hasta ahora se nos ha dicho, y de que el logro de este objetivo, en el tiempo que realmente debe tomar, depende de nosotros, la gente del común”, concluye Adrián Correa.

Si desea conocer más acerca de este tema, existe información en español en el portal www.alianzalongevidad.com

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