Autora: Dra. Gilma E. Garrido

Fecha:

Categoría: Nutrición al Día

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Deliciosos ‘arbolitos de brócoli que evitan la oxidación

Deliciosos ‘arbolitos de brócoli que evitan la oxidación

Considerada una verdura crucífera, similar en forma a la coliflor, el repollo y la col, este maravilloso alimento contiene un potente antioxidante que ha demostrado efectos muy beneficiosos para la salud. Su particularidad la diferencia del resto de verduras por su alto contenido de glucosinolatos.

Estos compuestos se metabolizan en el organismo en isotiocianatos, que son antioxidantes. El sulforafano es el antioxidante más potente del brócoli, el cual ha demostrado una importante acción anticancerígena, de ahí el interés de los nutricionistas por promocionar un mayor consumo natural del brócoli.

Cómalo por salud

La Organización mundial de la salud recomienda un consumo diario mínimo de 400 gramos de verduras, hortalizas y frutas para obtener el máximo beneficio alimenticio de estos grupos de alimentos que, según los especialistas, contienen minerales, vitaminas, fibra y antioxidantes y convierten a las verduras y en especial al brócoli, en un alimento escogidos para la prevención de enfermedades crónicas y trastornos como:

  • Obesidad
  • Cardiovasculares
  • Diabetes
  • Cáncer
  • Estreñimiento.

Propiedades nutritivas

El brócoli ha sido calificado como la hortaliza de mayor valor nutritivo por unidad de peso de producto comestible. Es una fuente excelente de vitamina C, ácido fólico y niacina, y una buena fuente de provitamina A (beta-caroteno), vitamina B1 y E. El beta-caroteno es un pigmento natural que confiere el color amarillo-anaranjado-rojizo a los vegetales y que el organismo transforma en vitamina A según sus necesidades, la cual contribuye al mantenimiento de los tejidos corporales, favorece la resistencia a las infecciones, es necesaria para el correcto desarrollo del sistema nervioso y para la visión e interviene en el crecimiento. También participa en la elaboración de enzimas en el hígado y de hormonas sexuales y suprarrenales. Además, es reconocida por su acción antioxidante, al igual que la vitamina C. Ésta última colabora en la formación de colágeno, huesos y dientes, glóbulos rojos y favorece la resistencia a las infecciones y la absorción de ciertos nutrientes de los alimentos (hierro, ácido fólico y ciertos aminoácidos). Estas son otras propiedades y componentes del brócoli que aportan a su salud:

Los folatos: intervienen en la producción de glóbulos rojos y blancos, en la síntesis del material genético y la formación de anticuerpos del sistema inmunológico.

El potasio: se relaciona con la transmisión y generación del impulso nervioso, el funcionamiento de la actividad muscular normal, así como en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula.

El magnesio: tiene que ver con el funcionamiento de intestino, nervios y músculos, forma parte de huesos y dientes, mejora la inmunidad y posee un suave efecto laxante.

El yodo: es un mineral indispensable para el buen funcionamiento de la glándula tiroides, que produce las hormonas tiroideas. Éstas intervienen en numerosas funciones metabólicas, como el mantenimiento de la temperatura y del metabolismo corporal. Asimismo, el yodo es esencial en el crecimiento del feto y en el desarrollo de su cerebro.

Prepárelo hasta en la sopa

El brócoli es una verdura que, tras el cocinado, ha de quedar «al dente» para aprovechar en mayor medida sus componentes nutricionales. Son comunes las recetas de brócoli como primer plato o principal, dispuesto en ramilletes, cocidos o asados, si bien la verdura troceada en láminas se convierte en otra forma apetecible de probar el brócoli salteado con otras hortalizas. Sus tallos y arboles cocidos y macerados también pueden convertirse en una deliciosa sopa en días de frio.

La receta más sencilla y simple de brócoli es el salteado con ajos, un plato al que se le puede dar un punto de sabor y color si se le añade pimentón. La mezcla de hortalizas y verduras de hoja verde, como la propuesta de brócoli sobre puré de arvejas, por su combinación nutritiva (hierro, magnesio y vitamina K), es muy recomendable en caso de:

  • Anemia ferropénica.
  • Contracturas musculares.
  • Recuperación ósea.

El brócoli con champiñones también es un delicioso, así como su preparación asada con salsa de almendras. También puede mezclarlo con un rehogado de cebolla o como pizza de brócoli, cebolla y champiñones; o que tal una ensalada con espárragos y pimentones, ¡sencillamente exquisita!

“El brócoli es adecuado para todo tipo de preparaciones a base de cereales, como el arroz, unos lacitos de pasta, una lasaña o con un guiso de legumbres. Esta variada lista de recetas brinda la posibilidad de iniciarse en el consumo de brócoli, una verdura excepcional, de manera sencilla, asequible y rápida”, concluye la asesora nutricional de Consumer Eroski, Maite Zudaire.

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