Con estas posiciones se mejora su circulación

La práctica de yoga trabaja varios tipos de torsión corporal que brindan beneficios específicos al organismo. Se trata de posiciones que activan los órganos de una manera particular potenciando el transporte de nutrientes y la eliminación de toxinas.

La variedad de asanas (posturas de yoga) comprende ejercicios corporales entre los que se encuentran:

• Flexiones
• Estiramientos
• Inversiones
• Torsiones

Estas posturas optimizan el funcionamiento corporal al logra:

• Activar los órganos de la parte superior del cuerpo (torsiones).
• Fortalecer los músculos de las costillas y la espalda.
• Comprimir los órganos del tórax, pelvis, cadera y columna para que las células y los canales del cuerpo que se encargan de la absorción de nutrientes queden más receptivos a absorber vitaminas y sangre oxigenada.
• Activar la circulación,
• Expulsar las toxinas a través del sistema linfático y el circulatorio.

Respire y salude al sol

En la ejecución de las torsiones es importante preparar el cuerpo para que los músculos logren un mejor estiramiento. Esto se puede llevar a cabo por medio de ejercicios de Pranayama (respiración) o por medio de asanas de calentamiento.

“Una buena manera de prepararse para las torsiones es hacer saludos al sol y kapalabhati -variedad de pranayama en donde se respira aceleradamente por la nariz-”, asegura Valeria Quintana, instructora de yoga.

La respiración juega un papel muy importante en la práctica de yoga, tanto para el desarrollo como para la ejecución de estas posiciones, esta ayuda a:

• Estabilizar la mente.
• Propiciar la concentración.
• Controlar el flujo de aire.
• Optimizar la predisposición de músculos y órganos.

Las ventajas en su cerebro

En cuanto al sistema nervioso, el yoga, en general, es una disciplina que ayuda en procesos de ansiedad y estrés. Gracias al control de la respiración y la relajación, el cerebro balancea mejor la producción de diferentes sustancias y hormonas que proporcionan un estado mental de satisfacción. Leer más en: yoga y mantras para la sanación integral

“La generación de endorfinas, que son neurotransmisores que se adhieren a las neuronas y modifican el ritmo en que estas disparan electricidad, se puede regular con la respiración, haciendo que partes del cerebro se activen más que otras, lo que proporciona un mejor balance en la actividad de este órgano” , afirma Juan Camilo Vargas, neurólogo Clínica de Marly.

Su dieta para el yoga

Para la práctica de yoga es muy importante la dieta. Si se quiere lograr un avance en posiciones de torsión y estiramientos se recomienda la vegetariana, además:

Disminuir el consumo de proteína animal: esta genera masa muscular y, por lo tanto, no es recomendable el uso de este tipo de alimentos si la intensión es volver el cuerpo más flexible.

Controlar el consumo de carbohidratos: el exceso de estos puede afectar el transporte de nutrientes y la circulación.

Preferir el consumo de vegetales: en especial de apio, perejil y espárragos que facilitan el drenaje corporal por su contenido en agua y fibra.

Más información

Centro de Medicina Biológica y Estética Gilma E. Garrido
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Toda la vida es yoga.
Diana María Escobar. Editorial Grijalbo. Enero de 2014.