¿Cómo aprovechar el tiempo?

Vivimos en una época en la que el deseo de hacerlo todo dirige nuestras vidas, y tenemos el peor enemigo para hacerlo: la falta de tiempo. Consumidos por el tráfico de la ciudad y el estrés que ocasiona tener una, aparentemente interminable, lista de cosas, vivimos empujando nuestros horarios para poder cumplir con nuestras responsabilidades. Sin olvidar la necesidad y el deseo de  dejar suficiente tiempo para descansar, divertirnos y pasar tiempo con nuestras familias y amigos.

La verdad sea dicha, cada tarea que tenemos la terminamos realizando a última hora por haber priorizado el descanso, la diversión u otras tareas más sencillas que nos ofrecen un sentimiento de satisfacción más fácil o rápido. Esto tiene un nombre, <<procrastinar>>.

Procrastinar significa aplazar o diferir. Comúnmente nos referimos a procrastinar como aplazar tareas. Lamentablemente, es algo que todos hemos hecho y tendemos a arrepentirnos más tarde. Creyendo que sería más fructífero aprovechar el tiempo en tareas más sencillas, termina siendo una labor tediosa pues la realizamos estando cansados o bajo el estrés de correr contra el tiempo. Este juego de creer aprovechar el tiempo, cumplir con nuestras tareas bajo estrés, terminar cansados y buscar el tiempo para descansar termina convirtiéndose en un circulo vicioso. Siempre querremos aprovechar un rato más para descansar o divertirnos ya que hemos estado muy cansados por el estrés de cumplir con nuestras responsabilidades a última hora.

¿Qué podemos hacer para romper el circulo?

La clave está en la organización objetiva y efectiva de nuestro tiempo. Algunas veces es mejor realizar las tareas más difíciles primero, pues las demás serán más fáciles y rápidas, dejando un espacio libre para divertirse o descansar sin la presión de saber que aún tienes quehaceres pendientes. Algunas recomendaciones son:

• Haz una lista en orden de prioridad de tus tareas
• Plantea un horario que crees puedas cumplir. ¡Lo más realista posible!
• Intercala tus tareas con cortos descansos para incrementar tu productividad. Por ejemplo, concéntrate durante 45 minutos y toma recesos de 10 minutos en los que te pares del lugar en el que estás
• Cambia de contenidos a la hora de trabajar, así evitas aburrirte trabajando horas en el mismo tema
• Realiza tus actividades lejos de distracciones, deja tu teléfono móvil lejos y apaga el televisor
• Finalmente, lo más importante. ¡Controla la ansiedad! Haz ejercicio, medita, duerme bien, no dejes las cosas para última hora.

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