Autora: Dra. Gilma E. Garrido

Fecha:

Categoría: En Tratamiento

Compartir:

Antibióticos vs probióticos

Antibióticos vs probióticos

De manera tradicional las bacterias y los microorganismos son considerados agentes causantes de enfermedad. Combatirlos con antibióticos se ha constituido en una práctica normal como tratamiento estándar para combatir casi todas las enfermedades infecciosas.

Sin embargo, las investigaciones han demostrado que algunas bacterias contribuyen con la salud como agentes probióticos (promotores de la vida). El uso de estas ha tenido una rápida propagación como respuesta a la resistencia a los antibióticos y gracias a sus mínimos efectos secundarios.

“El uso de probioticos ayuda al paciente en la eliminación de toxinas, la absorción de vitaminas, la inmunomodulación y a estimular el crecimiento de las células intestinales”, explica el gastroenterólogo clínico Emiro Meisel.

“El ser humano convive con 100 billones de microorganismos, solo en el intestino, bacterias que lo protegen y ejercen una función de barrera contra agentes dañinos colonizadores, permitiendo así el mejor funcionamiento del sistema inmunológico”, explica la cartilla Principios de terapia microbiológica de Laboratorios Euro Life.

Función protectora

Estos microorganismos también se encuentran en la piel y la mucosa de los seres vivos cumpliendo funciones como:

  • Modular el sistema inmune
  • Prevenir infecciones
  • Restaurar el equilibrio corporal

Sus diferencias

El uso de antibióticos y probioticos se regula de acuerdo con la el tipo de medicina que ejerza el profesional de la salud que los formula; aunque actualmente la mayor educación de los pacientes frente a las enfermedades ha llevado a que sean estos quienes elijan qué tipo de medicina prefieren para sí mismos.

Estas son algunas de las diferencias sustanciales entre antibióticos y probiótico:

Antibióticos

Sustancias activas: bacterias y hongos
Modo de acción: bactericidas
Centro de acción: tracto urinario, tracto respiratorio.
Efectos en la microflora: trastornos fisiológicos gastrointestinales como consecuencia del daño de la microflora.
Efectos en el sistema inmune: ninguno; sin embargo, pueden presentarse deficiencias inmunológicas.
En infecciones leves, gripales y rinitis: no indicados.
En infecciones severas, otitis interna, sinusitis y bronquitis: no son estrictamente necesarios, aunque el criterio de formulación depende de la severidad del cuadro clínico y de las consideraciones del médico tratante.  
En infecciones graves, meningitis, neumonía y encefalitis: son absolutamente necesarios.
Limitaciones: pueden incrementar la resistencia bacteriana y propiciar las infecciones virales.

Probióticos

Sustancias activas: microorganismos vivos o muertos o sus componentes.
Modo de acción: reforzamiento del sistema inmunológico por activación de macrófagos y linfocitos B y T.
Centro de acción: sistema inmune y diferentes comunidades microbianas.
Efectos en la microflora: activación inmunológica de las mucuosas como apoyo al correcto funcionamiento de la microflora.
Efectos en el sistema inmune: regulan y modulan las deficiencias inmunes.  
En infecciones leves, gripales y rinitis: son la indicación ideal.
En infecciones severas, otitis interna, sinusitis y bronquitis: generan progresos satisfactorios.
En infecciones graves, meningitis, neumonía y encefalitis: activan mecanismos inmunes.
Limitaciones: agotamiento de la capacidad de autocuración.

Más información
www.eurolife.com.co

 

Comentarios

Este articulo no tiene comentarios. Sé el primero en dejarnos un comentario...

Enviar comentario

0 / 280