A limpiar el espacio sideral

El impacto reciente de un meteorito en Rusia alertó a la comunidad científica, a los ciudadanos y organizaciones ambientalistas sobre la necesidad de analizar las regulaciones internacionales relacionadas con el lanzamiento de misiones al espacio, con el propósito de reducir la generación de basura que orbita el planeta.

Estos desechos espaciales, convertidos en partículas, son micrometeoritos potenciales, para los cuales es necesario configurar mecanismos de protección para aminorar cualquier impacto en la tierra.

Planear las misiones

El 95% de los desechos que circundan al planeta fueron generados por misiones, según explica Saúl Santillán Gutiérrez, del Centro de Alta Tecnología de la Facultad de Ingeniería, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“El estudio del espacio es motor para el desarrollo  de innovaciones en tecnología satelital -telecomunicaciones, pronóstico del tiempo y navegación aérea-; con estos propósitos se lanzan satélites a distintas órbitas y por eso los investigadores de la UNAM, en conjunto con los de otras instituciones mexicanas, desarrollan trabajos orientados a planear las misiones del futuro con un enfoque de sustentabilidad”, agrega Santillán.

A poner orden a los desechos siderales

El propósito es asegurar que al final de la vida útil de los satélites, la última dotación de combustible se utilice para moverlos a una trayectoria que los devuelva a la superficie terrestre, precisó el científico, quien además comentó que los trabajos abordan:

• Detección de partículas espaciales
• Modelos matemáticos de generación de desechos
• Planes de protección

Desechos siderales

Se consideran basura espacial los desechos que circundan la tierra generados por las misiones espaciales:

• Satélites fuera de uso
• Fragmentos de cohetes utilizados en lanzamientos a las órbitas más lejanas.
• Residuos de combustible no quemado

Las normas de limpieza

Las regulaciones respectivas contemplan la “Regla de los 25 años” para la destrucción total de los artefactos, después de caer a la atmósfera. Sin embargo, existen lagunas para asumir  responsabilidades en los impactos de los dispositivos obsoletos, de acuerdo con lo que plantean los científicos mexicanos.

Actualmente, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) trabaja en una norma ISO para legislar el uso de la órbita LEO (hasta mil kilómetros desde la superficie terrestre), la más llena de residuos.

Misiones sustentables

El manejo sustentable de las misiones al espacio permitirá crear un modelo que se integre al protocolo de administración y planeación de los viajes fuera del planeta e buscará implementar una cultura mundial entorno a la reducción de este tipo de basura.

Más información
www.unam.mx