12 reglas de oro para aprender a ser resilientes

El duelo por la muerte de un familiar o la ruptura con la pareja, una enfermedad, la pérdida del trabajo, las dificultades económicas, el fracaso de un sueño, entre otras situaciones nos pueden llevar a cuestionarnos sobre la fuerza y la voluntad necesaria para continuar adelante.

Pueden existir dos opciones: dejarnos vencer y sentir que hemos fracasado o sobreponernos y salir fortalecidos, apostando por la resiliencia.

¿Qué es la resiliencia?

Es la capacidad que tenemos los seres humanos para afrontar las crisis o situaciones potencialmente traumáticas y salir fortalecidos de ellas. De esta manera, las personas resilientes logran:

• Sobreponer su buena actitud antes las adversidades.
• Utilizar la situaciones traumáticas para crecer y desarrollar al máximo su potencial.
• Entender que no existe una vida cruel y despiadada, sino, solamente, momentos difíciles.
• Ver el mundo de una manera más optimista.
• Ser conscientes de que después de la tormenta llega la calma.
• Sorprender por su buen humor y afrontar la vida con una sonrisa en los labios.

Como alcanzar la resiliencia

No se nace siendo resiliente, esta es una cualidad que se adquiere y quienes adoptan esta actitud es porque han tenido en sus padres o en alguien cercano un modelo a seguir, también puede ser que hayan encontrado el camino por sí solas.

“Para ser resiliente debemos cambiar algunos de nuestros hábitos y creencias. Las personas resilientes han tenido que luchar contra situaciones adversas o han probado varias veces el sabor del fracaso y no se han dado por vencidas. Al encontrarse al borde del abismo, han dado lo mejor de sí y han desarrollado las habilidades necesarias para enfrentar los diferentes retos de la vida”, indican en su blog especialistas del Centro de Psicólogos El Prado, en Madrid (España).

12 características del resiliente

Co le dijimos esta es una práctica de vida que puede adoptar y si desea hacerlo puede seguir esta guía para lograrlo.

Las personas que practican la resiliencia:

1. Son conscientes de sus potencialidades y limitaciones: se conocen y saben cuáles son sus principales fortalezas, habilidades, limitaciones y defectos. De esta manera pueden trazarse metas que tienen en cuenta sus necesidades y sueños.
2. Son creativas: transformarán su experiencia dolorosa en algo bello o útil.
3. Confían en sus capacidades: no pierden de vista sus objetivos y se sienten seguras de lo que pueden lograr. Además reconocen la importancia del trabajo en equipo y saben cuándo pedir ayuda.
4. Asumen las dificultades como una oportunidad para aprender: son capaces de ver más allá de lo momentos dolorosos y no desfallecen, asumen las crisis como una oportunidad para generar un cambio, para aprender y crecer.
5. Practican el mindfulness o conciencia plena: tienen el hábito de estar plenamente presentes, de vivir en el aquí y ahora y de tienen una gran capacidad de aceptación. Son capaces de aceptar las experiencias tal y como se presentan e intentan sacarles el mayor provecho. Disfrutan de los pequeños detalles y no pierden su capacidad para asombrarse ante la vida.
6. Ven la vida con objetividad: saben cuáles son sus potencialidades, los recursos que tienen a su alcance, sus límites y sus metas, pero eso no implica que no sean optimistas.
7. Se rodean de personas que tienen una actitud positiva: viven entorno a quienes mantienen una actitud positiva ante la vida y logran crear una sólida red de apoyo que les puede sostener en los momentos más difíciles.
8. No intentan controlar las situaciones: saben que es imposible controlar todas las circunstancias o coyunturas; han aprendido a lidiar con la incertidumbre y se sienten cómodos aunque no tengan el control.
9. Son flexibles ante los cambios: como para adaptar sus planes y cambiar sus metas cuando es necesario.
10. Son tenaces en sus propósitos: las distingue su perseverancia y su capacidad de lucha.
11. Enfrentan la adversidad con humor: son capaces de reírse de la adversidad y sacar una broma de sus desdichas.
12. Buscan la ayuda de los demás y el apoyo social: son conscientes de la importancia del apoyo social y no dudan en buscar soporte profesional cuando lo necesitan.

Un tip para aprender a sumir la resiliencia es, cuando tenemos un contratiempo, preguntarnos: ¿qué puedo aprender de esto? o ¿qué puedo sacar de bueno con esto que ha ocurrido?

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